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miércoles, 12 de abril de 2023

POR QUÉ NECESITAMOS LÍDERES AMBIDIESTROS



Charles Galunic en INSEAD Knowledge del pasado 27 de marzo plantea que el mundo de los negocios está lleno de contradicciones y las mejores organizaciones no las evitan, sino que procuran gestionarlas a lo largo del tiempo.

Gestionar las contradicciones de forma eficaz requiere líderes ambidiestros, que sean lo suficientemente discernientes y diestros para conseguir un equilibrio óptimo y dinámico entre dos imperativos opuestos.

Las contradicciones se pueden presentar de distintas formas específicas: visión a corto o a largo plazo, autonomía (modelos descentralizados) versus colaboración (sistemas centralizados y sinérgicos) y dos modos esenciales: “exploración” de nuevas oportunidades para el desarrollo de negocio versus “explotación” de los recursos ya existentes para obtener unos retornos más inmediatos.

Manejar las contradicciones con frecuencia implica sentirse presionado por distintos grupos de interés y mantenerse por encima de situaciones difíciles e incómodas., como por ejemplo el caso en que una parte de los “stakeholders” demanden que la compañía reduzca costes para mantenerse ante un competidor rival y otros estén convencidos de que el futuro de la compañía se apoya en la innovación a largo plazo y proyectos con un amplio horizonte.

Sin la habilidad de gestionar estas contradicciones los líderes no pueden guiar a sus organizaciones a través de la complejidad. El autor sugiere que existen 4 formas de cultivar un patrón mental ambidiestro:

1.- Abrazar y tolerar las paradojas y contradicciones

Implica reconocer y articular conscientemente que contradicciones tales como corto/largo plazo, local/competitivo versus colectivo/cooperativo y exploración versus explotación son todas valiosas y necesarias para el buen desempeño de las organizaciones. Significa reconocer el valor de las paradojas y de sus implicaciones para recordar éste valor y lógica básicos.

2.- Embarcarnos en la autoreflexión y autorreconocimiento

Debemos preguntarnos si mantenemos unas preferencias fuertes que condicionen nuestra forma de pensar (dogmas e ideologías). Nadie puede ser completamente objetivo y carecer de prejuicios. Es importante tener en cuenta nuestras propias preferencias y experiencias cuando nos enfrentemos a situaciones que demandan pensamiento paradójico y reflexión paciente.

3.- Formular la situación de diferentes maneras

Cuando pensemos en una situación o problema, especialmente sobre desarrollo organizacional, debemos practicar utilizar enfoques mentales contrarios, tales como un marco de exploración y otro de explotación. La variedad cognitiva puede ser una fuente de innovación recombinante, creando un abanico más amplio de soluciones potenciales derivado de los distintos enfoques que aplicamos  ante un problema. El famoso sistema de producción just in time de Toyota es un ejemplo en el que enfoques paradójicos coexisten: altas eficiencias y reacciones rápidas y adaptativas.

4.- Utilizar pensamiento divergente y convergente para considerar dimensiones en competencia

El pensamiento divergente significa que ´mantenemos separadas las lógica de exploración y la de explotación. Al menos por un tiempo no debemos permitir que una de ellas domine a la otra, buscando, en cambio, caminos y estrategias que faciliten abarcar tanto la exploración como la explotación con el menor coste, conflicto o confusión posible. 

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