John C. Maxwell, coach,
conferenciante, uno de los mayores expertos en liderazgo a nivel mundial y
autor ( ha vendido más de 24 millones de ejemplares de sus libros), acaba de
publicar “Good leaders ask great questions””. En él defiende la importancia de dominar
el arte de hacer preguntas para nuestro crecimiento personal y el desarrollo de
ideas y de equipos.
Maxwell destaca el gran
valor que tiene hacer preguntas, entre otras, por las siguientes razones:
1.-
Sólo vamos a obtener respuestas a las preguntas que hagamos. En
muchas ocasiones no nos atrevemos a preguntar para evitar que consideren los
demás que no sabemos algo o que parecemos tontos con lo que lo que logramos es
dejar de aprender algo que seguramente necesitamos conocer. Richard Thalheimer
dice:”Es mejor parecer desinformado que estar desinformado”. Por lo tanto,
debemos apartar nuestros egos y hacer preguntas aunque corramos el riesgo de
parecer estúpidos.
2.-
Las preguntas ayudan a abrir puertas que de otra forma permanecerían cerradas. En
nuestra vida nos encontramos ante varias puertas. Escondidas tras ellas se
encuentran multitud de posibilidades que nos conducen a oportunidades,
experiencias, personas,…Pero las puertas deben ser abiertas para poder acceder
a ellas y las llaves para abrirlas son las preguntas. Peter Drucker decía:”Mi fortaleza más valiosa
como consultor es el ser ignorante y por tanto hacer algunas preguntas”.
Como líderes cuando nos
encontramos ante un problema y no sabemos qué hacer debemos plantear las
siguientes preguntas:
a).-
¿Por qué tenemos este problema?
b).- ¿Cómo podemos
solucionar este problema?
c).- ¿Qué pasos
específicos hay que dar para solucionar este problema?
3.-
Hacer preguntas es el modo más eficaz de conectar con las personas. Evidentemente
para ello debemos ser capaces de plantear las preguntas adecuadas. Lo que
preguntamos es importante, pero también cómo lo hacemos: George Bernard Shaw
decía que el principal problema con la comunicación es la ilusión de que hemos
logrado conectar y comunicar lo que queremos.
4.-
Las preguntas cultivan la humildad. En muchas ocasiones el
miedo ( a parecer inseguros, a no valer, a demostrar inexperiencia o
ignorancia,…) hace que nos sintamos vulnerables y evitemos hacer preguntas. La humildad que demostramos
al preguntar facilita que los demás nos vean como auténticos, vulnerables y
ayuda a crear lazos de confianza e intimidad. Las personas se abren a aquellos
que se abren a ellos.
5.-
Las preguntas ayudan a implicar a los demás en las conversaciones. Larry King, famoso presentador americano piensa que el secreto de una buena
conversación está en hacer preguntas. Éstas nos van a permitir conocer mejor a
los otros y a establecer relaciones con ellos.
6.-
Hacer preguntas nos ayuda a construir mejores ideas. Cualquier
idea mejora cuando las personas adecuadas tienen la oportunidad de aportar
sugerencias y las buenas ideas pueden convertirse en excelentes cuando las
personas comparten y trabajan juntas
para conseguirlo.
El autor recomienda una
serie de preguntas que son las que intenta utiliza cuando se relaciona con los
demás:
a).- ¿Cuál es la
lección más importante que has aprendido? Al hacer esta pregunta busca la
sabiduría del otro.
b).- ¿Qué estás
aprendiendo ahora? Esta pregunta le permite beneficiarse de su pasión.
c).- ¿Cómo ha influido
el fracaso en tu vida? La respuesta facilita claves de cuál es su actitud.
d).- ¿A quién conoces
que deba conocer? Esta pregunta nos va a permitir acceder a su red de contactos.
e).- ¿Qué has leído que
deba leer? La pregunta va dirigida a incrementar mi crecimiento personal.
f).- ¿Qué has hecho que
deba hacer? Su objetivo es ayudarme a encontrar nuevas experiencias.
g).- ¿Cómo puedo serte
de utilidad? Con esta pregunta muestro mi gratitud y mi deseo de ayudarles si
puedo.
La clave para compartir
las ideas está, como hemos comentado, en preguntar a las personas adecuadas las
preguntas adecuadas. Maxwell recomienda seleccionar personas que:
·
Entiendan el valor de las preguntas.
·
Deseen el éxito de los demás.
·
Añadan valor a los pensamientos de los
demás.
·
No se consideren amenazadas por las
fortalezas de los otros.
·
Puedan manejar adecuadamente las emociones ante cambios rápidos en las
conversaciones.
·
Entiendan su valor dentro del grupo.
·
Extraigan las mejores ideas de las personas
que les rodean.
·
Hayan demostrado experiencias de éxito
en el área objeto de discusión.
·
Abandonan la reunión con una actitud de
buscar el “nosotros” y no el “yo”.
Thomas Edison decía:
“Las ideas que utilizo son fundamentalmente ideas de personas que no son
capaces de desarrollarlas”.
7.-
Las preguntas nos facilitan obtener una perspectiva distinta. Con
demasiada frecuencia los líderes se encierran
en su punto de vista y dedican su tiempo a intentar convencer a los
demás de la bondad de sus opiniones en lugar de tratar de conocer cuáles son
las suyas. Para evitarlo hay que recurrir a las preguntas y escuchar con
cuidado a las respuestas, lo que nos va a permitir descubrir valiosas
perspectivas distintas a las nuestras. Estas preguntas van a ser útiles porque
frecuentemente:
a).- Creemos
erróneamente que los demás destacan en las mismas cosas que nosotros y por lo
tanto tienen nuestro mismo punto de vista.
b).- Pensamos que a los
demás les motivan las mismas cosas que a nosotros.
c).- Creemos que los
demás tienen la misma visión de las cosas que nosotros.
Los mayores errores en
el proceso de comunicación se suelen producir porque las personas tienen
distintas perspectivas de las cosas y para evitarlos hay que hacer preguntas.
8.-
Las preguntas cuestionan las actitudes y nos sacan de nuestras rutinas. Hacer
preguntas es una forma de prevenir la pereza mental y de sacarnos de nuestra
zona de confort. Si comenzamos una tarea con certezas es probable que la
finalicemos con dudas, pero si estamos dispuestos a empezarla cuestionando
distintos aspectos seguramente terminemos con certezas.
Si queremos hacer
descubrimientos, si queremos cambiar el “status quo” y encontrar nuevas formas
de pensar y de hacer tenemos que hacer preguntas. Éstas son el primer eslabón
de la cadena de la innovación.
El autor propone que
los líderes hagan una serie de preguntas
dirigidas a:
I.-
ELLOS MISMOS:
Un líder tiene que
entender que las preguntas son parte habitual de su vida. Como líder puede
permitir que sean los demás los que hagan las preguntas duras o importantes,
pero también puede ser él el que sea proactivo y se haga esas preguntas a sí
mismo para garantizar su integridad, aumentar su energía e incrementar su
capacidad de liderazgo.
Entre las preguntas que
nos debemos hacer sobre nosotros mismos el autor recomienda las siguientes:
1.-
¿Estoy invirtiendo en mi crecimiento personal?
La mayor inversión que podemos hacer es en nosotros mismos, ya que va a
determinar el retorno que obtendremos de nuestras vidas. Tres factores
determinan el que lo hagamos y la forma de hacerlo:
a).- Mi auto imagen:
¿Cómo me veo a mi mismo como persona? ¿Tengo una visión positiva de mi mismo o
negativa? Las personas con baja percepción de sí mismos no suelen invertir
mucho en su desarrollo personal ya que no creen en su potencial.
b).- Mis sueños: ¿Cómo
veo mi futuro?. Nuestras aspiraciones van a ejercer gran influencia en nuestros
esfuerzos para desarrollarnos.
c).- Mis amigos. ¿Cómo
me ven los demás? Tenemos que buscar amigos que crean en nosotros y nos
estimulen. Las personas necesitamos a otros que nos ayuden a crecer y a mantenernos inspirados.
2.-
¿Estoy realmente interesado en los demás? Si somos líderes
o aspiramos a serlo tenemos que preguntarnos cuáles son nuestras razones.
Existe una gran diferencia entre las personas que quieren liderar porque están
genuinamente interesados por los demás y desean ayudarles y las que se mueven
por intereses exclusivamente personales, que lo que buscan es:
a).- Poder: adoran el
control y añaden valor a sí mismos reduciendo el de los demás.
b).- Posición: los
títulos son el alimento de su ego. Se aseguran de que los demás sientan su
autoridad y conozcan sus derechos derivados de su posición.
c).- Dinero: utilizan a
los demás y se venderán por obtener ganancias económicas.
d).- Prestigio: el
quedar bien es más importante para ellos que el actuar bien.
Es fácil que un líder
pierda su foco, razón por la que debe diariamente revisar sus motivos para no
anteponer sus intereses sobre los de aquellos a los que lidera y no abusar de
su poder. No debe olvidar las tres preguntas que las personas hacen a sus
líderes: ¿Puedes ayudarme?, ¿Te importo? Y ¿Puedo fiarme de ti?
3.-
¿Soy equilibrado o tengo un concepto irreal de mi propia importancia? Los
buenos líderes tienen que exhibir tres
características importantes:
a).- Humildad para
entender su posición en el contexto general. Los líderes humildes se sienten
cómodos con lo que son y no sienten la necesidad de atraer la atención de los
demás hacia ellos. Prefieren que los demás brillen y les ayudan a hacerlo.
b).- Autenticidad. Los
líderes que triunfan con frecuencia son puestos en pedestales por los demás.
Para mantener el equilibrio deben bajarse de él y mezclarse con los demás y lo
hacen siendo honestos y auténticos.
c).- Contar con un
propósito trascendente.
4.-
¿Estoy añadiendo valor a mi equipo? Como líderes tenemos
que pensar de qué manera podemos conseguir que nuestro equipo sea mejor, cómo
añado valor a sus miembros y fomento el trabajo en equipo. Maxwell sugiere que
para ello el líder debe :
a).- Impulsar el compromiso de sus miembros con el equipo,
para conseguir que todos, empezando por él mismo trabajen, juntos, dando lo
mejor de sí mismos.
b).- Crear un entorno
de estímulo y apoyo, reconociendo las contribuciones de cada uno de sus
miembros.
c).- Considerar la
adversidad como un medio para el desarrollo. Podemos saber lo bueno que es un
equipo cuando surge la adversidad y detectamos sus debilidades y fortalezas.
Con la actitud adecuada aprenderá y mejorará.
d).- Tener en cuenta
las fortalezas y debilidades de cada miembro del equipo. Los buenos líderes son
como entrenadores que son capaces de sacar lo mejor de su gente.
5.-
¿Estoy siendo eficiente? Para ello debemos preguntarnos si
nos estamos apoyando en nuestras fortalezas o estamos perdiendo el tiempo
intentando adquirir cualidades que no tenemos. Nuestros
esfuerzos se deben dirigir fundamentalmente a potenciarlas.
6.-
¿Me preocupo por lo que ocurre cada día? Los buenos
líderes tienden espontáneamente a mirar al futuro. Son reconocidos por su
visión y por su capacidad de guiar a los demás para alcanzar metas elevadas.
Pero no es en el futuro donde se hacen las cosas, sino en el momento actual y
por tanto el líder debe estar atento a lo que ocurre en cada momento. El
problema surge para decidir cómo distribuir correctamente el tiempo cada día.
Maxwell señala que como él no puede hacer todo todos los días se centra en las
cosas que considera importantes que son: vivir de acuerdo con sus creencias (
actuar con un propósito trascendente), su familia, sus relaciones ( dedicar
tiempo a entender a los demás y a establecer relaciones), su misión personal(
en su caso añadir valor a los líderes para que éstos a su vez lo hagan con los
profesionales a su cargo) y cuidar su salud.
7.-
¿Estoy invirtiendo mi tiempo en estar con las personas adecuadas? El
mayor legado que puede dejar un líder es el de dejar líderes. Esto supone
buscar y encontrar a las personas adecuadas e invertir en ellas continuamente.
El autor propone los siguientes factores, que son los que él considera para
seleccionar a candidatos potenciales:
a).- Influencia: ¿Son
capaces de influir en otras personas?
b).- Capacidad: ¿Tienen
el potencial de crecer y desarrollarse?
c).- Actitud: ¿Sienten
el deseo de crecer y de desarrollarse?
d).- Química: ¿Nos
gustamos?; ¿Existe sintonía entre nosotros?
e).- Pasión: ¿Están
automotivados?
f).- Carácter: ¿Son
equilibrados?
g).- Valores: ¿Son
nuestros valores compatibles?
h).- Trabajo en equipo:
¿Tienen la capacidad de trabajar bien en equipo?
i).- Apoyo: ¿Me añaden
valor a mí?
j).- Creatividad: ¿Son
capaces de ver posibilidades en lo que parece imposible?
k).- Opciones: ¿Su
contribución me facilita opciones y posibilidades?
l).- 10 por ciento:
¿Son de los 10% mejores miembros del equipo?
Muy buen artículo. Una sopa de verdades. Gracias.
ResponderEliminarExcelente artículo, a veces nos cohibimos de hacer preguntas, por miedo al que dirán, gracias por compartir el conocimiento.
ResponderEliminarMuy buen articulo, nos dice mucho de lo que debemos mejorar
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