James Manktelow
en el boletín del 26 de junio de 2012 de Mind Tools aborda el concepto de carisma y facilita unas recomendaciones
para ayudar a su desarrollo.
Carisma se puede
definir como el conjunto de rasgos y comportamientos que hacen que una persona
resulte atractiva a otras. El término procede de la palabra griega “charis” que
significa gracia regalo.
Una persona
carismática suele ser asertiva, tiene confianza en sus posibilidades, tiene la
capacidad de inspirar y ser cálida con los demás. En el trabajo saben atraer a
los colaboradores y consiguen ganar su confianza y tener influencia sobre
ellos. No se debe utilizar el carisma para manipular con el fin de lograr que otras personas hagan
algo que va en contra de sus intereses.
El carisma es una
forma de manifestarse del poder referente, según los psicólogos sociales JohnFrench y Bertram Raven que en su “Teoría del Poder Social”, que se basa en la premisa de que
el poder y la influencia implican la relación de al menos 2 agentes y que la
reacción del agente pasivo es en dónde se encuentra la explicación al
fenómeno social de la influencia y el poder, identifican 5 tipos de poder:
1.- Poder legítimo: procede de la
creencia de que una persona tiene el derecho de hacer demandas que otros están
obligados a satisfacer y que tiene derecho a esperar el sometimiento y la
obediencia de los demás. El grado de poder legítimo
que posee esa persona será el que los demás quieran otorgarle en función
de los derechos que crean que posee.
2.-
Poder de recompensa: deriva de la capacidad de una persona de compensar a otra
por su conformidad. Utiliza recursos que la persona a la que se recompensa desea y valora positivamente.
3.-
Poder de experto: se basa en el alto nivel de los conocimientos y habilidades
de una persona sobre un tema. Este tipo de poder es muy específico.
La capacidad de poder que otorga ser competente en algo, especialmente si los
otros ignoran todo o parte, se manifiesta en aceptar las directrices señaladas
por los expertos. Suele producir escasas resistencias. Este tipo de poder es
muy específico. La capacidad de poder que otorga ser competente en
algo, especialmente si los otros ignoran todo o parte, se manifiesta en aceptar
las directrices señaladas por los expertos. Suele producir escasas
resistencias, pero supone un gran nivel de esfuerzo para mantenerlo.
4.-
Poder coercitivo: procede de la creencia de que una persona puede castigar a
otra si no hace lo que le ordena. Es el más efectivo a corto plazo pero a la
larga produce un comportamiento disfuncional en la persona afectada. Autores
como Philip Crosby y W. Edwards Deming sugieren que el ejercicio de este
tipo de poder provoca una caída de la productividad y creatividad en el lugar
de trabajo. En épocas de crisis económica o si peligra la supervivencia de la
empresa es cuando más se ve el ejercicio del poder coercitivo.
5.-
PODER REFERENTE: es el que se ejerce en base a los sentimientos de respeto,
admiración, confianza y lealtad hacia quien ejerce el poder. Este poder lleva
tiempo en desarrollarse y puede no ser efectivo en ambientes con alta rotación
de personal.
Numerosas
investigaciones avalan la idea de que se pueden aprender y perfeccionar los
rasgos y comportamientos que definen el carisma. Han mostrado, también, que los
líderes que están dispuestos a soportar dificultades son más carismáticos ante
sus equipos, así como los que muestran una actitud positiva. Un error común
consiste en asociar carisma con atractivo físico. Éste puede ayudar en algunas
ocasiones pero no es un requerimiento para ser carismático.
Desarrollar carisma es un proceso que lleva
tiempo y trabajo. Es importante tener en cuenta los siguientes aspectos:
1.-
CUIDAR LA PRESENCIA Y EL LENGUAJE CORPORAL:
Son
dos factores importantes. Sin decir ni una sola palabra el lenguaje corporal
correcto puede transmitir fuerza y calidez. Si adoptamos una postura derecha,
con los hombros hacia atrás y la cabeza levantada transmitimos sensación de
confianza y control y colabora a que nos sintamos así.
Es
importante, también, para tener carisma el adoptar una actitud positiva ante
las situaciones.
La
escucha activa es otro factor determinante. El mantener la atención centrada en
lo que dice el interlocutor, sin pensar en cómo vamos a responder ni dejar la
mente vagar tiene una enorme repercusión en el desarrollo de buenas relaciones.
2.-
AYUDAR A LOS DEMÁS A SENTIRSE BIEN:
Las
personas carismáticas procuran que las
personas con las que se relacionan se encuentren muy bien. En lugar de
centrarse en su propio éxito dedican tiempo y energía intentando ayudar a los
que les rodean. Al hacerlo contribuyen a crear un entorno de energía positiva
que resulta muy atrayente.
Se
muestran humildes sobre sus logros y
reconocen, con sinceridad y alaban el trabajo bien hecho de los demás.
Colaboran
en el desarrollo de sus colaboradores actuando como mentores y facilitando
coaching a los miembros del equipo más inexpertos.
Sonríen
en los momentos adecuados para facilitar la creación de un entorno agradable.
Procuran ser siempre sinceros. Es fundamental ser auténtico, ya que las personas
detectan con facilidad los comentarios que no son sinceros.
3.-
TENER UN ALTO GRADO DE INTELIGENCIA EMOCIONAL Y EMPATÍA:
Los
líderes que poseen este alto nivel son conscientes de sus propias emociones,
así como de las que les rodean. Esta percepción les permite mantener la calma
bajo presión y dar a los demás lo que necesitan emocionalmente.
La
empatía juega un papel importante. Al tener la capacidad de entender las
perspectivas, deseos y necesidades de los demás resulta más sencillo conectar
con ellos.
El
desarrollo de la inteligencia emocional y la empatía implica mantener las
propias emociones bajo control especialmente en situaciones conflictivas.
También significa que hay que prestar atención a los demás y por medio de la
observación del lenguaje, tanto hablado como escrito identificar que necesitan
y desean.
4.-
MOSTRAR ASERTIVIDAD Y AUTO-CONFIANZA:
La
auto-confianza se construye logrando adquirir todas las competencias que son
necesarias para desarrollar el trabajo con eficiencia.
La
asertividad va a servir para mostrar el poder personal, pero se debe utilizar
con amabilidad, respeto y dignidad.