Anne-Laure Favard, Jess Maiekodumni, Martina Mendola y Rachel Kenny en la edición de marzo – abril de Harvard Business Review plantean que tener una gran idea no es suficiente. Los líderes
deben crear un entorno que permita que los equipos colaboren con éxito a lo
largo del tiempo.
A pesar de que se produzcan
avalanchas de iniciativas a través de colaboraciones entre sectores las
organizaciones todavía luchan y se esfuerzan por desarrollar ideas que “cambien
el juego” y llevarlas a la venta. Muchas personas atribuyen esta situación a
que no tenemos todavía muchas ideas nuevas y que debemos trabajar con más
intensidad para conseguir la participación de una mayor diversidad de
profesionales. Ideas nuevas e imaginativas pueden venir bien y no hacen daño
pero nos estamos olvidando de una verdad importante: la innovación que tiene
éxito implica algo más que dejar que miles de ideas florezcan.
Como muestran estudios de “hackatones” y otras formas
aceleradas de innovación con frecuencia poco pasa tras la fase inicial de
brainstorming. Los organizadores de estas iniciativas tienden a centrarse en
facilitar la colisión de ideas y talentos sin planificar para el largo plazo.
Aquellos que toman parte en estas iniciativas lo hacen con la intención de
comprometerse a largo plazo , pero la mayor parte no están preparados o
subestiman lo que se les viene encima.
La realidad es que la
innovación es algo más que generar una idea, es un camino largo y colaborativo.
Daniel Epstein, CEO de Unreasonable Group” mantiene que el mundo de los negocios en el siglo veinte se definía con
frecuencia por tener ventajas competitivas, pero en el siglo XXI lo importante
van a ser las ventajas colaborativas. Diversas investigaciones avalan que la
innovación tiene más posibilidades de tener éxito si consiste en un proceso en
el que un intermediario se responsabiliza de provocar y sostener la
colaboración entre las personas implicadas.
El rol de estos
intermediarios consiste en:
PASO
1: ESTABLECER RELACIONES
Más allá de reunir a
las personas y facilitar una estructura para sus conversaciones el
intermediario debe conseguir que surjan relaciones de confianza. Un buen
ejemplo de cómo hacerlo lo tenemos en Unreasonable Impact, una asociación entre
Barclays y Unreasonable Group, que ofrece a una red de emprendedores los recursos que
necesitan para desarrollar sus nuevas iniciativas y ayuda a resolver los retos
que surgen para lograr que éstas progresen. Unreasonable Group desarrolla tres
programas cada año que reúnen a un selecto grupo de negocios en crecimiento. Estos
programas suelen durar de 5 a 7 días e incluyen sesiones que abordan
necesidades críticas de los emprendedores. Éstos, también, tienen la
oportunidad de conectar, obtener feedback y compartir preocupaciones. Hasta la
fecha los participantes han creado más de 300 iniciativas en 53 países y
empleado a más de 25.0000 trabajadores a tiempo completo. El éxito de Unreasonable
Impact (UI) a la hora de establecer colaboraciones se debe fundamentalmente a
dos factores:
a).-
Una selección cuidadosa
UI se encarga de
seleccionar los proyectos y a las personas invitadas a unirse a su comunidad para
asegurarse de que estén alineadas con la misión, valores y creencias de la
comunidad UI. El proceso de selección es riguroso y el éxito no es el único
criterio. Se buscan personas cuyas personalidades puedan contribuir a la
comunidad y que sean capaces de colaborar bien. El equipo de UI trabaja para
crear seguridad psicológica y tratan, de equilibrar las dinámicas de poder
entre mentores y mentorizados, por lo que a todos se les considera como compañeros (“fellows”).
b).-
Una dirección cuidadosa de la experiencia
UI gestiona las
experiencias desde workshops hasta actividades de construcción de equipos o
cenas comunitarias procurando combinar interacciones entre pequeños grupos y
periodos de tiempo para la reflexión. Por ejemplo, en las cenas se divide a los
participantes en mesas de 5 o 6 participantes junto a un mentor y a cada mesa
se le asigna un tema de conversación
sobre el que tienen que hablar todos los miembros. Puede ser que hablen sobre
decisiones que cambiaron su vida o describir algo que tenga un significado para
ellos, para que compartan experiencias personales y emocionales. Los programas
incluyen periodos de tiempo reservados para yoga o para paseos tranquilos. La importancia
de tener espacio para la reflexión radica en que ésta es la forma en la que las
personas llegamos a entender a aquellos con los que hemos compartido experiencias
intensas y podemos descubrir con quién pensamos que podemos establecer
relaciones profundas y posiblemente colaborar y trabajar para desarrollar nuevas
ideas.
PASO
2: DESARROLLAR RELACIONES
Una vez que se ha
formado una idea y una relación se ha creado, los colaboradores deben definir
sus metas compartidas, las métricas y objetivos, la población diana y definir los procesos y estructuras que
necesitarán para que su idea se convierta en realidad y den apoyo a las
operaciones cotidianas de un negocio en funcionamiento.
Crear un mapa del
camino para una colaboración es una tarea complicada y obtener una perspectiva
externa puede ser de mucha ayuda. Pasar de la etapa de las ideas a la de
implementación con éxito depende de dos factores:
a).-
Un seguimiento estructurado
La importancia de un
apoyo directo sostenido con frecuencia se pasa por alto por los organizadores
de sesiones de innovación abiertas o de “hackatones” que tienden a
centrarse en la rapidez y en la
generación de ideas. Pero gran número de intermediarios están reconociendo la
necesidad de apoyar a los innovadores y emprendedores más allá del evento
original. Un ejemplo de esto es el proyecto de innovación abierto # WirVsVirus,
una iniciativa alemana que reunió a siete organizaciones civiles como respuesta
a la pandemia del Covid-19. Comenzó con un “hackaton” online que atrajo a 28.000
participantes y produjo 1.500 ideas. Los organizadores planificaron desde el
principio un programa de seguimiento y apoyo de seis meses para ayudar a 150
equipos a hacer prototipos y probar las ideas que desarrollaron durante el “hackathon”
de 48 horas. En el curso del programa de seguimiento los participantes tuvieron la
oportunidad de conectar con expertos, inversores y socios potenciales. Los
equipos intervenían en llamadas semanales en las que compartían lo aprendido y
los retos a los que se enfrentaban. Los organizadores facilitaron mentores que
se centraron en el desarrollo de habilidades y en las dinámicas de los equipos
desde el primer momento, así como en presentar sugerencias sobre aspectos
relacionados con la gestión del proyecto y con la tecnología.
b).-
Ofrecer mentoring holístico
Muchos intermediarios
tienden a priorizar el ayudar a que los innovadores perfilen y ajusten sus
ideas en lugar de hacer de coaches de las personas que están colaborando entre
sí. Consideran las ideas creativas como esenciales para el éxito de los equipos.
Pero diversas investigaciones sobre equipos multidisciplinares muestran que las
dinámicas de equipo deben ser gestionadas si queremos que la colaboración sea
productiva. El intermediario puede ser muy eficaz si adopta el rol de coach y
crea espacios seguros para ofrecer también apoyo holístico y motivación. Por
ejemplo los mentores en Impact Hub London se comprometen con encargos que duran
de tres a nueve meses y como coaches ofrecen apoyo y ayudan a los colaboradores
a definir lenguajes comunes, a establecer expectativas y a ponerse de acuerdo en
los roles que van a desempeñar cada uno. Distintos estudios han demostrado que
todas estas actividades son críticas para la colaboración multidisciplinar
entre diferentes sectores.
PASO
3: SOSTENER Y GESTIONAR EL EQUIPO
En esta fase el
intermediario puede ayudar al equipo de dos formas:
a).-
Ofreciendo puntos de control reflexivos
Al crear oportunidades
para que los colaboradores se reúnan en workshops, llamadas semiestructuradas o
retiros, los intermediarios pueden ayudar a los equipos emprendedores a
negociar roles y relaciones cambiantes, restablecer la alineación e introducir
nuevas estructuras de gobernanza. Estos puntos de control o seguimiento ofrecen
una oportunidad para la reflexión permitiendo a los emprendedores sociales que
den un paso hacia atrás y consideren lo que han aprendido de una forma
constructiva para que puedan implementar esas lecciones.
Estos puntos de control
y seguimiento ayudan, también, a los emprendedores a gestionar su estrés y
emociones. La necesidad de compartir y reflexionar es la razón por la que , por
ejemplo, el hub Casa de Impacto de Lisboa celebra eventos como el desayuno de
los Fundadores en el que invita a emprendedores a unas reuniones íntimas para
promover las conexiones informales y para compartir el conocimiento. Similarmente,
intermediarios como OpenIDEO una plataforma de innovación abierta siempre
incluye llamadas semanales cuando está desarrollando comunidades de
emprendedores sociales. Éstas permiten que los miembros de las comunidades
reflexionen sobre sus experiencias, comparten sus historias y escuchan a los
demás.
b).- Nutriendo el
ecosistema
Además de promover
esfuerzos colaborativos, UI aspira a crear una comunidad de emprendedores
sociales ligada a una amplia red de mentores, inversores e innovadores. Un
ecosistema que prospera posibilita a los innovadores el poder incrementar su
iniciativas. Los alumnos de los programas se mantienen conectados y establecen
nuevas conexiones, convirtiéndose en mentores ellos mismos. Inversores
potenciales construyen relaciones con los miembros de los equipos , facilitando
en ocasiones el capital para sus iniciativas o ayudándoles a asegurar
financiación.
OpenIDEO, por ejemplo,
se centra en asuntos sociales y ambientales y nutre un ecosistema de
emprendedores. Una de sus iniciativas es la Food Waste Alliance, una red de 70
emprendimientos, junto a expertos, inversores y otros grupos de interés. La idea
tras ella es ofrecer a los emprendedores e innovadores una oportunidad de
intercambiar conocimiento, preparar prototipos, recibir feedback, asegurar
financiación y establecer colaboraciones. El equipo de OpenIDEO ha desarrollado
una plataforma donde compartir semanalmente los progresos y hacer preguntas. Matt
Ridenour, líder de la alianza, comparte recursos, invita a los expertos invitados
y anima a los participantes a compartir herramientas, guías, mejores prácticas,
retos y hasta oportunidades de financiación. También, han celebrado eventos en
las oficinas de IDEO en San Francisco en las que se han reunido
participantes e inversores.